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La publicidad, drama social

Autor: Yván Alexander Mendívez Espinoza
Doctor en Comunicación Social

“Se dice de mí… se dice que soy fea, que camino a lo malevo, que soy chueca y que me muevo con un aire compadrón. Que parezco un dinosaurio, mi nariz es puntiaguda, la figura no me ayuda y mi boca es un buzón. Si charlo con Luis, con Pedro, con Juan hablando de mí los hombres están. Critican si ya la línea perdí, se fijan si voy, si vengo o si fui, se dice ¡ja! muchas cosas mas el bulto no interesa. ¿Por qué pierden la cabeza ocupándose de mí? Yo sé que hay muchos que desprecian con mentiras y suspiran y se mueren cuando piensan en mi amor.

Y más de uno se derrite si suspiro y se quedan si los miro resoplando con temor. Si fea soy -pongámosle- que de eso ya yo me enteré,
más la fealdad que Dios me dio mucha mujer me la envidió y no dirán que me creí porque modesta siempre fui. Yo soy así.”

Actriz Ana María Orozco, de la novela colombiana Betty La Fea.

Tal vez se rompan las reglas de la construcción de un artículo al iniciar con la letra de un tema musical, que narra la historia de una ser humano que en su drama social alcanza el éxito a través de sus supuestas debilidades, pues si se realiza un parangón histórico se tendría que decir que la letra no fue hecha para una fémina sino para una causa comercial y acusada casi siempre de nada social: la Publicidad. Damisela que tal y conforme se describe en la letra de la canción ha sido criticada desde su nacimiento por sociedades de rito como por sociedades de teatro, y es que la misma es parte de la evolución, crecimiento y desarrollo de la humanidad, algunos críticos alcanzan a decir que la Publicidad es la más pura representación de lo que ocurre en la sociedad -si deseas conocer a una sociedad, conoce primero su publicidad- y vaya que la misma en cualquier medio en el que se difunda muestra claro está el perfil sociológico de cada pueblo.

Si bien Turner en su libro “La Antropología como experiencia”, nos cuenta sobre el paso del rito al teatro en sociedades con drama social o bien ya con drama escenario, considera sin mencionarlo que la publicidad está presente en cualquiera de los estadíos sociales. Veamos por ejemplo que si rito (presente en el drama social) se entiende como acto religioso o ceremonial repetido invariablemente en cada comunidad cultural; puede consistir en fiestas y ceremonias, de carácter más o menos solemnes, según pautas que establece la tradición o la autoridad religiosa de la organización correspondiente, esto en sociedades no industriales podría haberse denominado Propaganda (madre de la Publicidad), cuyo mensaje era emitido por razones de cambio de conciencia o anuncios de los señores respecto a información sobre sus ceremonias y actividades. El teatro, nueva forma del drama social más bien denominada drama escenario propone la afiliación a lo estético, a lo persuasivo, mesa servida para que con todas sus características intrínsecas en una era pre industrial electrónica se afinque la Publicidad como instrumento de difusión de los objetivos de negocios de las empresas que promueven el consumismo (para muchos la debilidad de nuestra época).

Las sociedades han evolucionado, la cultura de las mismas han incluido en su devenir el uso de la Publicidad, a interpretación de lo dicho por Turner como el instrumento o disciplina que crea conflictos sociales de discriminación, exclusión e inclusión (temas tocados hasta el hartazgo por antropólogos, Sociólogos y Comunicólogos) se hace necesario para mejorar la “conciencia de clase”, incluso mejora y revitaliza la imagen de los seres y por tanto de las organizaciones. Si bien Durkheim define que la ley necesita delito como la religión necesita pecado, podría asumirse que la sociedad necesita consumo, en consecuencia el instrumento persuasivo para el mismo sería la Publicidad, ente que genera una excelente propuesta capitalista para generar intercambio económico entre ofertantes y demandantes, esta relación amical o de fricción social permite que se activen la conciencia y la autoconciencia de la sociedad. Ante esta realidad queda darle a la Publicidad las gracias por generar una vida social activa y cada día menos inerte.

Volvamos a la letra de la canción.

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